En España hay grandes editores de novelas (gráficas o no) pero, disculpadme, Daniel, Nuria, Donatella, Raúl, Claudia, Ricardo… ATA siempre va un paso por delante de todos vosotros. ¿Puede haber algo más subversivo que los descomunales miembros erectos de Puchalsky (que no ganó el Premio Nacional de Cómic porque a alguno se ruborizó), los escatológicos y decrépitos seres de Furillo o las bizarras y salvajes vicisitudes de los niggers de Marra? ¡Sí se puede!
La prestigiosa línea sesuda del editor ubicado en Palma de Mallorca (la ciudad cuyo cacique tacha de franquista al héroe de Trafalgar, Federico Gravina ¡nacido en 1756!), cual moderno grimorio, traduce Jo només il·lumino la catalana terra (Malas Herbes) de Valero Sanmartí y dibujicos de Roger Peláez al español: Necrocatalanomicón (Autsaider).