La Orden de los Caballeros Templarios ejercieron dominio sobre esta comarca durante el siglo XII y fuerón quienes erigieron la primera iglesia. Ha sido reformada en diversas ocasiones a lo largo de los siglos.
El Exterior es de aspecto sencillo lo que a priori nos impide imaginar su fascinante interior, misterioso y mágico lleno de color. Todavía conserva una de las capillas templarias donde los novicios templarios, que peregrinaban a pie desde Castellote, capital de la encomienda templaria, para realizar los ritos de iniciación bajo la clave (TAU) de la cúpula de esta capilla para convertirse en Caballeros de la Orden.