“Reconoceremos sus derechos porque está en la esencia de la democracia y de la adscripción a la Constitución actuar de esa forma, pero nadie nos podrá impedir que mientras estos individuos no se arrepientan, no hagan autocrítica moral, no pidan perdón, nadie nos podrá impedir que les deseemos que ni un segundo de paz presida sus vidas hasta el final de las mismas y que nuestra memoria y la de las víctimas los acompañe y torture siempre”, concluyó Lambán.
“Reconoceremos sus derechos fundamentales pero nadie nos podrá impedir, es más, estaremos siempre obligados a honrar la memoria de las víctimas, acompañar en el dolor a sus familias y hacerlo siempre de tal manera, con la serenidad y la prudencia que tanto caracterizaba a hombres como Manuel Giménez Abad, a hacerlo siempre con la mesura que no dé a entender nunca a la sociedad que, en vez de homenajear a las víctimas, estamos homenajeándonos a nosotros mismos”, añadió Lambán.