Natalia Chueca: «Le hemos dado la vuelta a la ciudad de Zaragoza en solo cuatro años y hoy los zaragozanos viven mejor, tienen mejores servicios y han recuperado la ilusión»
Natalia Chueca
Consejera de Servicios Públicos y Movilidad del Ayuntamiento de Zaragoza y candidata a la alcaldía de Zaragoza por el Partido Popular
Tras una amplia trayectoria profesional en el sector privado, Natalia Chueca llegó a la política en 2019 entusiasmada por el proyecto que Jorge Azcón tenía para Zaragoza.
En esta entrevista, Chueca nos detalla algunos de los proyectos más importantes que se han llevado a cabo en estos casi cuatro años desde la consejería de Servicios Públicos y Movilidad.
También nos cuenta cómo encara, como candidata a la alcaldía, las próximas elecciones y las medidas que tomará si llega a estar al frente del Consistorio.
¿Podría hablarnos brevemente de su trayectoria profesional antes de llegar al Ayuntamiento de Zaragoza?
No puedo evitar sonreír cada vez que me hacen esa pregunta, porque conservo muy buenos recuerdos y muy buenos amigos de esos años. Me licencié en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad de Zaragoza, animada por el ejemplo y el espíritu emprendedor de mi madre, una mujer luchadora que cada mañana levantaba la persiana de su tienda.
Después cursé un máster MBA en la EADA de Barcelona y de allí di el salto a Bassat Ogilvy, una prestigiosa agencia de publicidad. Allí conocí a la otra mujer que ha marcado mi vida, Bettina Ferreras, mi primera jefa, que me enseñó la importancia de la pasión en el trabajo, de escuchar al cliente y adelantarte a la competencia. Después llegué a Imaginarium, donde alcancé mi plenitud laboral. Hoy soy como soy gracias a esa empresa y a Félix Tena. Fueron veinte años intensos, de dedicación absoluta. Si no hubiera sido por mi marido, hubiese sido un ejemplo perfecto de adicta al trabajo.
¿Y por qué lo dejó todo para saltar al mundo de la política?
Porque me entusiasmó el proyecto de Jorge Azcón en un momento en que Zaragoza estaba abandonada por el anterior gobierno. Los zaragozanos somos muy afortunados, porque Jorge Azcón es el mejor alcalde que ha tenido esta ciudad. Y me remito a los hechos: hemos bajado impuestos, reducido la deuda, aumentado la inversión en los barrios y destinado más dinero que nunca a políticas sociales.
De hecho, hemos incrementado en un 47% la inversión social durante los últimos cuatro años con 100 millones al año en el Área de Acción Social y Familia. Y todo ello, mientras Zaragoza está liderando la revolución verde en Europa a la vez que generamos nuevas oportunidades empresariales de empleo y riqueza. Puedo decir con orgullo que le hemos dado la vuelta a la ciudad de Zaragoza en solo cuatro años y hoy los zaragozanos viven mejor, tienen mejores servicios y han recuperado la ilusión.
Su primer cargo en el mundo de la política ha sido en la consejería de Servicios Públicos y Movilidad. ¿Qué balance hace de esta etapa?
Muy positivo. Me encontré una consejería con la mayor parte de las grandes contratas caducadas. Esto significa que, además de carecer de contrato en vigor, generaba unos sobrecostes muy elevados a las arcas municipales. Durante los cuatro años de Gobierno de ZEC el Ayuntamiento perdió casi 14 millones de euros.
Me encontré con el servicio de limpieza público absolutamente devastado, con maquinaria obsoleta, y hoy disfrutamos de una mejor contrata, con tecnología de vanguardia y una flota eléctrica, a un coste menor. Eso nos va a permitir reforzar los servicios de limpieza que se han venido recortando desde el año 2012 en los barrios y los distritos. Y todo eso sólo es una pequeña parte de la gestión de Servicios Públicos.
Podría hablarte de las mejoras en todos los parques y zonas verdes, del ambicioso proyecto que hay en marcha de electrificación de la flota de autobuses con fondos europeos Next Generation o de los dos nuevos tranvías también financiados por Europa que veremos por las calles de Zaragoza también a principios del próximo año. Asistimos a una revolución para hacer de nuestra ciudad un lugar más saludable y sostenible y por eso nos han elegido para ser una de las 100 ciudades europeas que guiarán al resto en los programas de sostenibilidad e innovación hasta 2030.
Háblenos de las mejoras que se han llevado a cabo en los parques de la ciudad.
El equipo de parques ha trabajado excepcionalmente estos cuatro años. Además de poner en marcha la nueva contrata, hemos impulsado la mejora de las zonas verdes de la ciudad, hemos intervenido en el parque Grande para dotarlo de espacios bellos como la rosaleda, hemos reformado también el parque Miraflores y hemos impulsado acciones en las zonas verdes de plaza Reina Sofía, por ejemplo.
Y todo ello introduciendo, además, nuevos criterios de gestión y mantenimiento mucho más sostenibles y que están siendo reconocidos y galardonados por asociaciones como la FEMP. Pero queda mucho por hacer: ahora mismo estamos ultimando los proyectos de reforma de varios parques emblemáticos de barrios como El Rabal o Las Fuentes.
Los parques son esenciales para garantizar la calidad de vida de los ciudadanos, por eso nos preocupamos de reverdecer la ciudad. Lo hemos demostrado poniendo en marcha un plan específico de replantación para acabar con los alcorques vacíos en las calles y avenidas de nuestra ciudad. La renaturalización de la ciudad está en el ADN de este Gobierno.
Respecto a los quioscos, ¿cuántos se han licitado y puesto en marcha en estos años y cómo están beneficiando a la ciudad?
Detectamos una necesidad: revitalizar unos espacios en suelo público que estaban sin uso o con las concesiones caducadas. Así que pusimos en marcha un plan de choque desde Servicios Públicos que no solo permitirá dinamizar parques, andadores y bulevares donde se ubican, sino que además generarán 800.000 euros anuales en concepto de canon a abonar al Ayuntamiento de Zaragoza.
Y todo ello, además, siguiendo unos criterios estéticos y de servicio que los concesionarios tienen que cumplir. Los quioscos municipales van a tener una imagen homologada y van a colaborar en la creación de puestos de trabajo y en la estética propia de esos espacios.
El Bosque de los Zaragozanos es el proyecto medioambiental más ambicioso de esta legislatura. ¿Qué beneficios aportará a la ciudad?
El más ambicioso, el más ilusionante para la ciudadanía y el de más valor ambiental, porque los árboles y los arbustos que hoy se están plantando son el legado que vamos a dejar a nuestros nietos.
Contribuirá a descarbonizar la ciudad, pero lo más importante es que estamos haciéndolo entre todos, contando con empresas, colegios, entidades vecinales y todo tipo de colectivos de la ciudad, sensibilizando sobre la necesidad de cuidar nuestro medioambiente.
¿En qué punto está el Bosque de los Zaragozanos?
El objetivo es plantar 700.000 ejemplares en 10 años. En apenas dos años de vida del proyecto, hemos superado los 100.000 árboles, alrededor de 100 hectáreas, gracias a la iniciativa empresarial y a miles de ciudadanos que han participado en las plantaciones con amigos y familiares.
¿Cómo ayudan iniciativas como el festival Zaragoza Florece a situar el nombre de Zaragoza en el mapa mundial?
En tres años hemos conseguido que el nombre de Zaragoza vuelva a oírse en España, en Europa y en todo el mundo. Sólo el año pasado visitaron el festival 300.000 personas y conseguimos que las flores diesen el salto y se extendiesen por el centro de la ciudad ocupando balcones y fachadas de edificios emblemáticos. Esto es un éxito, que esperamos superar en esta edición de 2023.
En apenas dos años de vida del proyecto, hemos superado los 100.000 árboles, alrededor de 100 hectáreas, gracias a la iniciativa empresarial y a miles de ciudadanos que han participado
¿Cómo ha cambiado la movilidad en estos últimos cuatro años en Zaragoza?
La Movilidad en Zaragoza, como ha sucedido en realidad en todo el mundo, se ha visto directamente condicionada estos años por la pandemia del COVID. Nuestro objetivo en este período ha sido ofrecer el servicio público de transporte más seguro y más asequible. Ahora ya parece muy lejano, pero Zaragoza fue la primera ciudad de España en limpiar a fondo todos los autobuses y tranvías cada día, para intentar minimizar contagios.
Fuimos pioneros en realizar estudios sobre la calidad del aire en el transporte público, de la mano de prestigiosos especialistas, mantuvimos la flota al 100% para facilitar desplazamientos, los primeros en poner hidrogel en todos los vehículos… Fueron meses muy intensos para, como decía, con muchas medidas implantadas favorecer la seguridad de la ciudadanía como premisa imprescindible.
Después de la tormenta, yo destacaría dos elementos: la movilidad ha cambiado, porque los hábitos ciudadanos también han cambiado, pero estamos poco a poco recuperando usuarios en el transporte y no ha aumentado el tráfico de vehículos privados. Y segundo: tenemos un mejor transporte público, con nuestra apuesta por la electrificación de la flota, que es la más importante de todas las grandes ciudades del país. Pese a todo, el balance es muy positivo.
¿Cuál es el grado de satisfacción de los zaragozanos con el servicio de Avanza?
No podemos obviar que empresa y trabajadores han mantenido un conflicto que ha durado demasiado tiempo y que al final se ha resuelto como tenía que resolverse: en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje y sin que al Ayuntamiento le cueste dinero, que es lo que sucedía en gobiernos anteriores.
Los paros han perjudicado la imagen del servicio, pero una vez normalizado creo que tenemos una red de bus urbano muy sólida, que transporta a más de 300.000 viajeros al día. De cara a esta paulatina normalización de la red tras el COVID, estudiaremos su reordenación y mejora, porque siempre hay aspectos en los que trabajar para mejorar el servicio.
¿Cómo favorece a la ciudad la llegada de los autobuses 100% eléctricos?
En todo. Hablamos de que cada autobús tradicional que se sustituye por uno 100% eléctrico ahorra a la atmósfera 1462 toneladas de CO2. Y a esto se suman otros puntos fuertes: son más silenciosos, son más amplios, más luminosos y más cómodos para los viajeros.
Los 68 nuevos autobuses, así como las obras de electrificación de las cocheras de AVANZA y la adquisición de dos nuevas unidades del tranvía, han sido financiados a través de los Fondos Europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. ¿Qué otras actuaciones se han podido llevar a cabo desde su área gracias a ayudas europeas?
De manera directa o indirecta el Ayuntamiento ha recibido ayudas europeas en la construcción de nuevos carriles bici, a través del Consorcio de Transportes, y proyectos medioambientales, energéticos y de gestión de residuos. Ahora también estamos pendientes de que se resuelvan otras peticiones pendientes, tanto para comprar más autobuses eléctricos como para crear un nuevo servicio de bicicleta pública que llegará a toda la ciudad y modernizaría el Bizi introduciendo casi el doble de vehículos que serían, además, eléctricos.
Desde su área se apoyó la renovación de la flota del taxi. ¿De qué modo ayuda esto a favorecer la incorporación de vehículos sin emisiones?
Hemos trabajado intensamente con el sector, que se vio muy perjudicado por la pandemia, además de por la subida de costes de los combustibles y de precios en general. Cada año el Ayuntamiento destina unos 500.000 euros a subvencionar diferentes aspectos del taxi: adquisición de vehículos eléctricos y sostenibles; adaptación para el uso de personas con discapacidad; revisión de taxímetros, etcétera. Y más de un millón de euros para el fomento del Taxi Accesible, que es un proyecto que beneficia a todos: usuarios, taxistas y al propio Consistorio.
Gracias a estas medidas, y al empeño puesto por el propio sector en modernizarse, hoy tenemos la flota más sostenible de España y un porcentaje de taxis adaptados por encima de lo que exige la normativa. A eso hay que sumar la nueva app, MOZA, que dará mucha más competitividad y calidad al servicio que ahora se presta.
¿Qué es lo más importante que le ha quedado por hacer en esta legislatura?
Si se ha quedado algo en el tintero lo ha sido por la realidad de una pandemia que nos condicionó en nuestra acción de Gobierno y en la gestión de algunos proyectos por el cambio de prioridades. Sucedió con el campo de fútbol, pero hemos recuperado el ritmo y será un proyecto que iniciaremos en la próxima legislatura con la mirada puesta en el Mundial de 2030.
Lleva velocidad de crucero tras un proceso de participación ejemplar y el anuncio del Real Zaragoza de que está dispuesto a financiar el proyecto en su totalidad. Estoy segura de que, pese a las trabas políticas, todo saldrá bien como esperan los zaragozanos.
Conocíamos hace un par de meses su designación como candidata del PP al Ayuntamiento de Zaragoza. ¿Cómo vive este momento?
Con serenidad y mucha ilusión de seguir con el proyecto y hacer cosas nuevas. Asumí el reto, consciente de la gran responsabilidad que se ponía en mis manos, pero también con la seguridad de saber que tenemos el mejor proyecto posible y el mejor equipo para seguir transformando Zaragoza en esa ciudad vanguardista, sostenible, saludable y vinculada a la innovación y la tecnología en la que llevamos cuatro años trabajando.
Europa se fija en nosotros y nos pide que seamos líderes en alcanzar la neutralidad de emisiones, empresas de todo el mundo nos visitan para poner en marcha proyectos relacionados con la conducción autónoma, inteligencia artificial y economía circular. Es un privilegio poder contribuir y aportar a esta revolución que se está produciendo en el diseño de las ciudades del siglo XXI.
¿Cuáles van a ser las líneas generales de su candidatura?
Continuar con la senda emprendida de la mano de Jorge Azcón transformar la capital aragonesa en una ciudad europea de vanguardia que atrae talento y garantiza el progreso económico. En cuatro años hemos logrado ser la segunda ciudad con mayor calidad de vida del país, nos hemos convertido en una de las ciudades españolas con mayor competitividad fiscal y Europa nos ha seleccionado como ciudad faro para guiar al resto en sus políticas de sostenibilidad, descarbonización e innovación.
Vamos a seguir atrayendo empresas de vanguardia que generen riqueza, empleo y conocimiento, seguir mejorando las ratios de reciclaje y economía circular y seguir haciendo de Zaragoza una ciudad modelo para vivir, de la que sus ciudadanos se sientan orgullosos con una programación cultural atractiva, y que siga siendo motor económico de Aragón.
Si llega a la alcaldía, y sería la primera mujer en hacerlo en 23 años, ¿cuáles serían sus primeras medidas?
No hay interrupción. Estamos en un tren en marcha, trabajando y gobernando para todos desde el respeto, la sensatez y la estabilidad. Este proyecto que hemos emprendido es el de Jorge Azcón y es también el de Natalia Chueca.
Alcanzar la neutralidad climática impulsando la renovación de la flota de buses y la rehabilitación de 3000 viviendas de los barrios tradicionales, reducir a cero los desechos que genera la ciudad con el nuevo proyecto Residuos Zero, continuar con el programa de apoyo al comercio Volveremos, impulsar la candidatura de Zaragoza como Ciudad del Deporte en 2026, seguir dotando de equipamientos los distritos como por ejemplo un nuevo centro de mayores en el Casco Histórico, nuevas escuelas infantiles, complejos deportivos o la recuperación del Huerva a su paso por el centro de la ciudad, que es otro gran reto pendiente… Está todo en marcha.
Tenemos la suerte de tener unos funcionarios de primer nivel en el Ayuntamiento de Zaragoza que han trabajado duro en todos estos proyectos y muchos más. Los veremos convertirse en realidad en la próxima legislatura.
¿Qué le gusta hacer a Natalia Chueca en su tiempo libre?
Salir a correr por las mañanas. Por el parque Grande. Me da la vida.
¿Qué rincones de Aragón nos recomienda para perdernos?
Cualquier rincón del Pirineo.
¿Qué es lo que más le gusta de esta ciudad?
Su gente.
¿Podría hablarnos de su familia?
Podría hablar durante horas de mi familia. Tengo tres hijos, que son mi pasión, y un marido que me apoya incondicionalmente y me ha enseñado a disfrutar de la vida. Tengo una madre, mi gran ejemplo, y tantos buenos recuerdos de mi infancia que no puedo enumerarlos todos. Comparto uno: el de las comidas en una torre de Borja, con mis abuelos. Nos reuníamos allí toda la familia cada fin de semana y era divertidísimo.
¿Qué valores le han transmitido sus padres?
Mi familia me educó en la cultura del esfuerzo, la solidaridad, la tolerancia y la libertad.
Háblenos de sus hobbies.
Deporte, montaña, paseos, aire libre.
Para una persona que se dedica a la política, ¿es difícil compaginar la vida privada con la pública?
Nunca he entendido mi vida como una dicotomía entre la parte laboral y la parte privada. Me apasiona lo que hago y me estimula saber que cada día tengo la oportunidad de trabajar por mi ciudad para dejarla mejor de lo que la encontré.
Redacción AEA (LLM)
Fotos: Daniel Marcos (Ayuntamiento de Zaragoza)
