Project Manager en Zaragoza Logistics Center e investigadora del proyecto europeo ReSChape
A día de hoy todos somos conscientes de la importancia de construir unas cadenas de suministro responsables y resilientes que proporcionen seguridad a los consumidores. En una época de inestabilidad climática y geopolítica, un gran abanico de disrupciones puede afectar a las cadenas de suministro y la logística en general, produciendo cortes de suministros, retrasos y todo tipo de desajustes a lo largo de las cadenas de valor entre proveedores, productores y operadores de transporte. A esto se le suman cambios en políticas y regulaciones, la globalización y sus largas cadenas de suministro, y los rápidos cambios en los modelos de demanda. Todo esto hace más necesario que nunca que las empresas tengan la capacidad de adaptarse constantemente a la volatilidad, incertidumbre, complejidad y ambigüedad (VUCA) para poder ser competitivas y aprovechar las oportunidades del cambiante mercado.
Pero, ¿qué pueden hacer las organizaciones para adaptarse y lograr esta transformación? En Zaragoza Logistics Center trabajamos en crear cadenas de suministro sostenibles y resilientes en Aragón y a nivel global, dada la complejidad de las actuales cadenas de valor. En nuestro trabajo de investigación dentro del proyecto ReSChape, nos enfocamos en transformar las actuales cadenas de suministro no solo para que sean sostenibles y resilientes si no para que sean responsables colocando a las personas en el centro de las operaciones y tecnologías (lo que conocemos como Industria 5.0).
La transformación digital es una herramienta muy valiosa en este camino hacia el futuro que necesitan recorrer las empresas, pero siempre optimizando la colaboración con las personas. La implementación de nuevas tecnologías como inteligencia artificial, internet de las cosas o blockchain mejora procesos y permite reducir riesgos, ya que garantiza transparencia, visibilidad y eficiencia en la logística. Otras tecnologías digitales como las plataformas basadas en la nube y los gemelos digitales van a mejorar la toma de decisiones estratégicas y operativas.
Pero para tener éxito en la transformación de las cadenas de suministro, y no solo adaptación, es necesario adoptar la sostenibilidad y resiliencia a nivel estratégico por parte de las organizaciones Esto incluye el diseño de la cadena de suministro y acciones que conlleven un impacto a largo plazo, que no solo sirvan para superar disrupciones específicas y puntuales si no que permitan a las organizaciones avanzar hacia una resiliencia sostenible y responsable. Esto implica una transformación de los procesos de la cadena de suministro, procesos innovadores y centrados en las personas que permitan una normalidad durante las disrupciones cuando sea posible y en su defecto, una rápida vuelta a la normalidad con los menores impactos posibles.
Otro de los ingredientes clave en esta transformación es la colaboración de todos los actores de la cadena de suministro, desde proveedores a clientes pero también competidores, organizaciones del entorno, representantes de la sociedad, políticos, proveedores de tecnología e inversores. La generación de conocimiento y su transferencia es clave para que todas las organizaciones puedan trabajar en esta dirección.
Este nuevo enfoque permitirá, a partir de ahora, que todos los obstáculos y disrupciones a las que se enfrenten las cadenas de suministro sean vistas como nuevas oportunidades y factores clave que nos permitan trabajar en su resiliencia y sostenibilidad de un modo colaborativo y eficaz.
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